Érase una vez un cabrón con sentimientos que un día se topó con la horma de su zapato...
Ser un cabrón. Ese concepto que tan mal visto por la mayoría de personas a las que puedes interesar que, lejos de acercarte a ellas, te suele separar. O eso dicen.
Cómo se define el ser un cabrón? Quién puede pensar que lo seas? Qué implicaciones puede tener? En definitiva, ser un sucio cabrón asqueroso se contempla como el aprovecharte de otras personas, como el manipularlas, como el exprimirlas hasta sus límites para luego dejarlas cual colillas en un parque (de los que no son para niños, que según la Ley ahora ya no se puede fumar en esos sitios. Mierda...). Pero cómo se es capaz de enganchar a alguien hasta el límite sin ser todo lo que esa persona desea de ti y además sin que se de cuenta de cómo eres en reaildad? Eso es más complejo.
Ser un cabrón es un estilo de vida. Es sentir que nadie puede hacerte daño. Es disipar el miedo a perder, creer que hacer más daño del que te puedan hacer a ti es lo correcto. Eso nos hace sentirnos seguros, tranquilos, porque supuestamente no sufriremos por lo que nos hagan y simplemente sentiremos que la vida es injusta y que a algunos les toca perder más que a nosotros mismos.
Pero qué pasa cuando, siendo un cabrón, sientes "algo" más de lo que sentías? Entonces te planteas cuán cabrón eres. Cuánto te cuesta serlo. Cómo has dejado que las cosas se escapen a tu sumo control. Y el cabrón se desmorona.
Esta reflexión ha sido concebida a raiz de una frase de una persona que nunca pensé que diría que: "decir que eres un cabrón antes de serlo con alguien, justifica el daño que hagas o puedas hacer después". Y ciertamente me ha hecho pensar en mi estatus de cabrón del cual nunca he estado orgulloso pero siempre me ha resultado productivo.
A todos aquellos que seáis como yo, dadle una vuelta.
PD: Media botella de pacharán avala mi reflexión.
viernes, 25 de febrero de 2011
jueves, 10 de febrero de 2011
Realidad Vs. Subjetividad
Afirmaciones: Este producto me parece caro. La distancia entre A y B es mucha. Eso está muy caliente.
Mi respuesta: ¿Con respecto a qué lo estás comparando?
Y es que a pesar de que los precios, las distancias, las temperaturas,... son unidades universales, para alguien siempre serán mayores o menores dependiendo de cómo, en su criterio, compare con otras cosas.
Hay quien dice que esto es una poderosa herramienta comercial ya que te permite darle la vuelta a los conceptos que tiene la persona de delante tuya para amoldarlos a tu propio criterio, sin embargo a mi me parece que las personas usamos esta subjetividad para hacer o no ciertas cosas, para autoconvencernos de que si hago X será mejor que Y en base a nuestro propio criterio o el de los demás.
Trabajando en ventas he visto desde aquellos que adquieren un producto por snobismo a los que lo hacen por fe ciega en el mismo. De igual modo, nuestra forma de ver la vida, influenciada por los acontecimientos que nos rodean, hace que muchas veces nos pongamos trabas antes de comenzar o comencemos algo sin ni siquiera evaluar pros y contras. Así, el cielo estará gris y todo nos irá mal, o nos levantaremos de la cama dando un salto mortal y nos comeremos el mundo, únicamente porque algo haya hecho "click" dentro de nosotros mismos, lo cual me lleva a cuestionarme lo siguiente: ¿se puede desactivar ese "click" y cambiar el curso de nuestras vidas?
Para mi la respuesta es sí.
Mi respuesta: ¿Con respecto a qué lo estás comparando?
Y es que a pesar de que los precios, las distancias, las temperaturas,... son unidades universales, para alguien siempre serán mayores o menores dependiendo de cómo, en su criterio, compare con otras cosas.
Hay quien dice que esto es una poderosa herramienta comercial ya que te permite darle la vuelta a los conceptos que tiene la persona de delante tuya para amoldarlos a tu propio criterio, sin embargo a mi me parece que las personas usamos esta subjetividad para hacer o no ciertas cosas, para autoconvencernos de que si hago X será mejor que Y en base a nuestro propio criterio o el de los demás.
Trabajando en ventas he visto desde aquellos que adquieren un producto por snobismo a los que lo hacen por fe ciega en el mismo. De igual modo, nuestra forma de ver la vida, influenciada por los acontecimientos que nos rodean, hace que muchas veces nos pongamos trabas antes de comenzar o comencemos algo sin ni siquiera evaluar pros y contras. Así, el cielo estará gris y todo nos irá mal, o nos levantaremos de la cama dando un salto mortal y nos comeremos el mundo, únicamente porque algo haya hecho "click" dentro de nosotros mismos, lo cual me lleva a cuestionarme lo siguiente: ¿se puede desactivar ese "click" y cambiar el curso de nuestras vidas?
Para mi la respuesta es sí.
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